Fede 23

No sé si lo dije alguna vez, pero me re cabe el bulo-consultorio. Tiene un morbo inigualable pensar que la sacrosanta sala, donde hombres grandes de anteojos y señoras con sus niños leen revistas mientras esperan al Dotor, será escenario de cabalgatas, spanking y oh sí.


Llego tarde, pero divina; como siempre. Fede 23 baja a abrirme y, si bien me saluda con un beso en la mejilla, no tarda en besarme en la boca en el pasillo; sin importarle la mirada extrañada de un vecino que en esos momentos sale a pasear a su perro.


23 ya tiene armado el famoso sofá-cama. Lo miro y sé que se va a caer al coño, que no va a resistir un revolcón con Lulú. Igual, no digo nada.

Para alimentar aún más nuestro morbo, 23 me pasea por el consultorio. Me muestra la camilla y los espejos. Qué buen bulo.


Vamos al sofá cama y me mira mientras me saco la ropa. Más tarde me diría que soy muy linda y que, a diferencia de la típica mujer cuyo atractivo dura lo que dura el dust, mi belleza permanece.


Después de una buena mamada, que es retribuida con una chupada de concha para el recuerdo, lo cabalgo de espaldas hasta que el sofacito cede y nos vamos casi a la mierda.

Me doy vuelta y me lo cabalgo de frente un rato hasta que acaba.
Trae Coca Zero. Charlamos unos minutos, en balls, en el sofa-cama hasta que él corre los vasos y me dispongo a chuparle la pija.

Se repite la sesión de mamadas mutuas, Fede 23 me hace acabar con la lengua y después me lleva a la sala con la camilla y el espejo. Me levanta una pierna y me coge apoyada sobre la camilla, frente al espejo. Fuerte.

Nos vestimos y nos vamos a "la sala de espera". Tomamos Coca y hablamos durante una hora. De todo lo que se nos ocurre. En algún momento me besa y se le pone la pija dura como una piedra. Gracias a Alá, el sofá cama ahora es sólo sofá; así que, sentado como está, me lo cabalgo como si no hubiera un mañana.

Axel: A reality cheque.

El miércoles Axel me preguntó si quería ser su novia y yo me quedé pensando a qué carajos se refería él con eso. Quiero decir, nuestra vida sexual se limita a unos diez minutos semanales y jamás se pasó un fin de semana entero (las noches de viernes y sábado, digamos) conmigo. Lo veo de a ratitos, antes o después de que se tenga que ir a hacer algo, y últimamente -como si fuera poco- tampoco lo estuve encontrando en su celular.

Aún así, Axel se sorprende cuando le digo que lo que me da no me alcanza. Que para estar así, lo más lógico sería seguir en una relación sin título y que cada uno hiciera la suya.

Yo digo: este pibe vio a su ex cornearlo en su propia cara (literalmente); ¿no aprendió nada? Yo, que en teoría soy su novia actual, le digo que no está nunca, que tiene el perfil perfecto del cornudo y se sorprende.

De los novios que tuve, sólo con uno pude mantener una relación monogámica. No era el más lindo, ni el más inteligente, no hacía acrobacias en la cama; pero estaba conmigo. No es complicado. Al mismo tiempo, Axel no es el hijo de puta de Cóndor, y si bien está pidiendo a gritos que lo caguen, no da boludearlo (me parece).

En fin, querido; no es tan complicado. Vos, ¿qué carajo querés?

Axel

¿Querés ser mi novia? me pregunta Axel, encima mío, en la cama.
Pienso: ¿y en qué va a cambiar nuestra relación?
Respondo: Depende.

¿Depende de qué?
Si me volvés a coger, sí.

Le chupo la pija como si fuera de caramelo y cuando está bien dura, le digo que se apoye contra el respaldo de la cama. Lo cabalgo mientras me chupa las tetas y acabamos, de nuevo, al mismo tiempo.

Besame, le digo; pero Axel no puede respirar. Me mataste, repite. Yo no le digo nada. En silencio, recuerdo las palabras de Demián, (un ex mío del que guardo un grato recuerdo) quien siempre me decía Lulú, vos estás hecha para coger.

Cóndor y la colita con vértigo

Segunda parte.




Jamás entendí el entretenimiento homosexual de Cóndor y su amigo, que consistía en hacerse pasar por mujeres y lograr que los tipos se masturbaran por camarita y hasta se metieran el dedo en el culo.

Cuando Cóndor y su amigo no la pasaban bomba haciéndose pasar por minas, usurpaban la identidad de un pobre desgraciado de "la uni" a quien le habían jaqueado la cuenta y dedicaban sus ocios a hacerlo quedar como un gay.

El amigo de Cóndor merecería un post (o varios) aparte. Un pibe de mi estatura (literalmente), que a sus 25 años no tenía carrera ni trabajo, que durante el día se bancaba que lo boludearan y le tiraran tierra en la cara (esto sí es metafórico) para, por la noche, aprovecharse del ingenio (?) de Cóndor y salir a hacerse pasar por otra gente para vengarse cobardemente de sus opresores. Dada la escasa estatura de este muchacho y su contextura robusta, nos referiremos a él de ahora en más como "la caja vengadora".

Una noche, La Caja Vengadora se hizo pasar nuevamente por este pobre pibe de "la uni" y con esa personalidad falsa invitó a uno de sus amigos a ir a hacerle un pete en medio de la noche.
Después de tanto joder, una mañana, la víctima cayó borracha en casa de Cóndor con la idea de cagarlo a palos, justo cuando él estaba en la estación de micros de Bahía Blanca, esperándome.

Bien por vos, Cóndor, que por fin cerraste este patético blog.
Todavía te falta cerrar este.

Cheers.

Nota: Gracias, Diego, por inspirarme con "La caja vengadora".




Rubia Lulú Retro: Sex on the desk

¡Por fin vuelven los posts culo-pija-concha!

En mis épocas de bailarina, una noche me tocó bailar con una amiga en la escuela de bellas artes. Yo fui con mi chico de esa época, Fede Alto Loser; un pibe que era el famoso "comemos pan mientras llega la pizza".

Durante lo que dura el show, yo me esmero en que la gente le preste atención a mi danzar, pero por las cosas que me gritan (qué par de tetas, rubia te cojo; qué gomas, pendeja) sospecho que poco les importa cuántas horas dediqué a preparar mi coreografía. Al terminar el mini show, mi chico me lleva a una de las aulas vacías y pone el escritorio de madera contra la puerta, para que nadie entre.

Me acuesta sobre el escritorio, me corre la bombacha y me empieza a la legüetear la concha como si no hubiera un mañana. F.A.L. (Fede Alto Loser) se tomó todo el licor y apenas coordina. Se acuesta sobre el escritorio y me sube encima suyo. Lo cabalgo hasta acabar y sigo, sólo porque me cae bien. Después de un rato de estar laburando y él no "llegue", me pongo a pensar en la ensalada que me comí al mediodía, la pollera que vi en una vidriera y casi me compro y el precio de la leche.

Presiento que F.A.L. está por acabar, cuando suena su celular. Le digo que no atienda, que si atiende, me bajo.
Sorpresivamente, su teléfono comienza a desplazarse por el escritorio (está en vibrador) y está a punto de suicidarse cuando F.A.L. lo agarra y atiende.

HOOOLAAAAAAAA
Como dije, me bajo y me quedo sentada en el escritorio, al lado suyo.

HOLAAAA, ¿QUIÉN ES? JUAN! JUAN, HIJO DE PUTA ME CORTASTE UN POLVO!!!
...
AY JUAN, AY ME ESTÁN TIRANDO LA GOMA; JUAN, ME ESTÁN TIRANDO LA GOMA AAAAAH

Finalmente, nos vestimos y abandonamos el lugar. F.A.L. está totalmente borracho.

Le digo que ni en pedo me lleva a mi casa, que se mate solo; y me pido un taxi.

O no.

*Un aire a Cóndor.

*Niño se prostituye por monedas en un pasillo.

*Junté plata y me hice la escalera.

*El chico cultiva su físico: lo dejó enterrado en una maceta en el fondo.

*Se me ocurren tantas cosas para decir...

*Soy emo

Cóndor y la colita con vértigo

Primera parte.

Como todos ya saben, mi ex (A.K.A. Cóndor) era un muerto de hambre. Para este destacado Licenciado en Filosofía, la mejor cita de Platón es la siguiente: Como dijera Platón, que me llenen el plato. En efecto, Cóndor siempre tenía hambre. Y también, en cualquier momento, se iba a comer el trozo.

Para comenzar, Cóndor me agregó al MSN por primera vez, haciéndose pasar por una chica. Sí, una chica cuyo blog también creó él. Cuántos de ustedes le habrán dedicado más de una a esa misteriosa jovencita, supuestamente de Neuquén pero con IP de Bahía, que siempre pasa las mismas fotos y no tiene camarita.

Esta chica, que en la vida real es igual a Condorito cuando no se afeita la barba; esta chica con el clítoris hinchadito histeriqueó a Fede 02 (A.K.A. Carachi) hasta que él le mostrara su pija por camarita (pijita, decía Cóndor; como si Scioli se riera de un tipo sin un dedo. Anyway.) Y no sólo eso: Cóndor le hizo a 02 una serie de antiblogs, le clonó la cuenta y dedicaba sus ocios a hacerse pasar por el mismísimo Fede 02 por MSN, chateando con sus desorientados contactos.

Cóndor usó varias identidades para comunicarse con Fede 02. A veces se hacía el amigo, a veces el enemigo. Una vez, incluso, lo citó a tomar un café y 02 propuso la esquina de Córdoba y Santa Fe, un domingo a las 18 hs. Todas estas identidades, todos estos personajes supuestamente porteños, neuquinos, mujeres y hombres; todos con el IP divino de Bahía Blanca.

¿Quién es más estúpido? pregunta Fede 02 en uno de sus posts sobre su "admirador"; ¿el estúpido? ¿O el estúpido que dedica horas a molestar al estúpido? Es la paradoja del huevo y la gallina (?). Yo sólo voy a decir al respecto, que ojalá Cóndor tuviera un milésimo del lomo que tenía Fede 02.

Axel: ¿Qué es el amor?

Segunda parte.

Sos como mi hermana, me dice Fede cuando estamos entrando a su casa; pero mucho más puta. Salió atorranta, la nena.

¿Cómo remontás una situación así? le pregunto a Fede. Todavía siento el olor a perro muerto en el aire. Él no me contesta y hace bien, era una pregunta retórica.

Axel me había pedido que le mandara un mensaje al llegar a casa. El tema es que no fui para mi casa. Pienso en mandarle un SMS diciendo que estoy con Fede, pero me parece que suena muy provocador. Aunque a esta altura Fede ya no tenga sexo para mí; sé que nuestra relación no es fácil de entender. Axel podría interpretar que después de tan desastroza cita huí por un revenge fuck y nada podría estar más lejos de eso.

Finalmente, opto por no escribirle nada. Si está preocupado, va a llamar; pienso. Y de nuevo me equivoco.
Estamos charlando, Fede y yo, cuando recibo un mensaje de Axel. Está preocupado porque no sabe nada de mí, dice; le explico que estoy en lo de Fede. Ah, ok; responde.

Un lector me invitó a un gang-bang, le cuento a Fede. Le pasé $300 por tipo.
Está bien, me responde. Las buenas putas cobran eso.
Gracias.

Axel vuelve a escribir. Dice que se quedó esperando mi llamado. Le explico la situación, pero sigue siendo bastante al pedo.
En la casa de Fede, todos me saludan como "la estresha de la blogósfera". Su hermano recién llegó y yo sigo hablando de la velada con Axel. Es el novio, explica Fede.

No es mi novio, la concha de la lora.
Es el novio, le repite a su hermano, como si yo no hubiera hablado.

Casi a la una del amanecer, pido que me llame un taxi.
Avisá cuando llegues, me dice. Nos despedimos.
Axel me llama y me dice que me ama.

Yo también lo amo. Es sólo que hoy las cosas salieron muy para el ojete.

Axel: ¿Qué es el amor?

Primera parte

Axel me pregunta si haría el sacrificio de acercarme a Villa Urquiza, para que esa noche podamos vernos. Recuerdo haber rechazado al 10 de River por hacerme la misma propuesta. Bueno, a Axel lo quiero and all that crap. Así que, por él, soy capaz de trasladarme a ese barrio lindero con la General Paz.

Llego al lugar indicado, Axel me pregunta a dónde quiero ir. Donde vos quieras, respondo. Ya hace un mes que me estoy viendo con Axel y siempre me llevó a buenos lugares; puedo confiar en él. O al menos eso creo.

Caminamos una cuadra, pasamos la vía y él señala una placita.
Me estás jodiendo, le digo.
No, me dice; quiero ir a esa plaza con vos.

Axel, me estás jodiendo (ya me paré en medio de la calle y lo miro horrorizada). Me querés llevar a una placita en Villa Urquiza, de noche; es una joda, ¿no?
Está herido, puedo verlo. Me dice que soy poco romántica, le digo que una cosa es ser romántico y otra, muy distinta, es ser un grasa.

No puedo creer que seas así, me dice, mientras caminamos hacia un Mc. Donald´s. Pensé que ibas a ceder un poco por mí.
Es que cedí mucho, le digo. Para empezar, estoy con vos pese a que no tenés bulo ni auto. Eso para mí es una gran cosa. Axel, yo rechacé al 10 de River por sugerir que me tome el 112 para venir hasta acá.

Entramos al Mc. Donald`s y, después de pedir dos cafés, nos vamos a una mesa.

Vengo del gimnasio, me dice mientras se saca la campera. Veo una de esas remeras que la gente suele usar para dormir o para pintar el patio. Se sienta al lado mío y el hedor me da una piña en la cara.

Le doy un beso. Eso es amor para mí: irme al culo del mundo para encontrarme con un chico con olor a perro muerto que me quiere tocar las tetas en una placita al lado de la vía, y aún así tener ganas de besarlo.

Él, sin embargo, no me devuelve las caricias.
Nos quedamos varios minutos, como pelotudos, mirando el café.

Discutimos, nos amigamos, nos besamos. Axel me dice que soy muy hermosa, que se muere por cogerme. Cuando salimos del Mc. Donald`s, sin embargo, explica que mañana se levanta temprano y que no vale la pena pagar un telo para estar un rato. Me da $19 para el taxi y se despide de mí.

Llamo a Fede. Es increíble, boludo; le digo.
Fede me dice que vaya para su casa.