Fede 08: Deus ex-machina

Sábado, 21 hs. Estoy sola.
Fede sigue acaparado por su novia; el del banquillo de los suplentes resultó ser un pelotudo que jamás federará y los demás señores disponibles son harto indeseables.

Me estoy haciendo la idea de que pasaré la noche con la única compañía de Mrs. Dalloway cuando alguien me habla por MSN.

Soy Fede 08, me dice, amigo de Fede.

¡Qué groso Fede! pienso, ¡por fin me mandó el franquero que tanto necesitaba!

Me encuentro en una situación de necesidad muy particular: necesito una buena cogida. Está bien, Fede 04 pasó anoche, pero necesito quedar medio muerta, transpirada y jadeando, necesito cansarme de contar orgasmos. Y lo necesito terriblemente. Fede 08 me invita a su casa. Así, de una. Yo voy, sin dudarlo. Es amigo de Fede y los amigos siempre se parecen.

Fede es lindo, divertido y coge bien, por lo cual un amigo de él será igual. Es una asociación lógica.
Me tomo un taxi y voy para allá. Me abre un bombonazo de un metro ochenta y pico, flaquito con lindo cuerpo y una carita preciosa. El pelo como me gusta a mí.
Lo mato, pienso enseguida. Suerte que tengo un escote que casi me llega al ombligo, medias de liga y tacos.
Pide unas empanadas por teléfono y nos ponemos a ver mi blog.

Le cuento cómo es el tema de los Fedes y se interesa. Incluso me da algunas ideas. Otra cosa muy calentante de 08 es que es del interior y tiene un acento afrodisíaco y gracioso al mismo tiempo. ¡Está para hacerlo mierda, muchachas!

A ver cómo besás, me dice, me agarra del cuello, siento su lengua en mi boca y me sube encima de él. Me agito. Cuando me tira para atrás y me acuesta sobre otra silla, me mareo tanto que por un instante siento que me voy a desmayar.

Me levanta las piernas como en las películas porno, me corre la bombacha y lo veo pasarme la lengua.

Me relamo, le chupo los dedos. Agarra el vaso frío de fernet que estaba tomando y me lo pasa por la concha antes de seguir chupándome; cuando creo que se está poniendo bueno, trae un pito de hule y me lo mete mientras me sigue lamiendo.

No lo puedo creer. Agarra gel y me mete los dedos en la cola. Voy a acabar en cualquier momento, pienso y trae un consolador más gordo.

A diferencia de 04 y gracias a Dios, al viejo y el nuevo testamento, a 08 le encanta tenerme arriba.

Me gusta sentirme chiquita y maleable; Fede 08 me hace sentir así, levantándome en el aire cuando menos lo espero. Es el chico más agresivo que conocí. Y me encanta. No sé ya cuántas veces me cogió, dejé de contar mis orgasmos. Cogeme como si fuera el último polvo de tu vida, me dice, e instintivamente le pego. Me la devuelve. Se viene encima mío y me coge fuerte mientras me pega en la cara.Podría quedarme dormida al lado de él. Es mi alma gemela del sexo, pienso, sin dudarlo. Todos los hombres deberían coger así. Y sufrir severos castigos si intentaran hacer las cosas de otra manera.

Cuando estamos por quedarnos dormidos le pido que me llame un taxi. Me duele todo, pero estoy feliz. Me encantó, Lulú, nos hablamos, me dice cuando me besa al despedirse.

Y besalo a él también, agrega, mientras se corre el boxer.