Lunes, 12.30 hs. Estoy en el 92 volviendo a casa de mi clase de canto. Intentando dormir, sin lograrlo. ¿Lulú? pregunta. Sí, respondo. Sé que es Fede 07 porque habíamos quedado en que me llamaría hoy para almorzar.
Estoy buscando la fedicidad, explica, y me dijeron que este era el número. Alrededor de una hora más tarde, pasa a buscarme por la esquina de mi casa. Veo un auto detenerse con decisión a mis pies. Hace frío y estoy totalmente tapada; pero mi altura y mi pelo largo, rubio, me delatan.
Lo veo cuando baja el vidrio pero pienso, no no, debo haber visto mal; no puede estar tan bueno. Entro mirando para abajo, vuelvo a levantar mis ojos. Lo miro. Sí, puede.Carajo, ¿por qué no avisan cuando están tan buenos? ¡Si sabía, en vez de venir con pantalón negro y sweatercito tierno me venía vestida de puta! Aunque no sería muy propicio para esa hora de la tarde, pero bueno, ¡una pollera tajeada, al menos! No importa.
Fede 07 da muchas vueltas con el auto buscando un lugar donde podamos comer. Da más vueltas. Tal vez piense que me molesta; pero yo estoy chocha, amo que me lleven en auto. Mientras tanto hablamos, claro, y es tan copada la charla como lo era por el mensajerito triste del google. Me pregunto si viéndome en persona seguirá pensando (como me dijo por chat) que tengo cara de petera.
Llegamos al lugar, comemos. Ya dejó de hacer frío y entra un sol re lindo por la ventana. Pienso en mi mamá, que como toda persona a la que alguna vez le dieron seis meses de vida, le basta ver rayos de sol como esos para ser feliz. Y no necesita nada más.Vuelvo a Fede 07. Con este blog vas camino a la fama, me dice. Viniendo de un periodista como él es un más-que-halago; aunque lo diga para federar más rápido, no importa. El tema es si vos ya decidiste que querés acceder a la fama, si ya lo decidiste vas por el camino correcto. Ya lo decidí, respondo.
Hablamos de mi carrera, su trabajo, planes para el futuro, experiencias. Una charla divertida, interesante. Qué bueno está federar con Fedes más grandes, pienso. No tiene punto de comparación. Fede 07 es más grande que yo y está recontracogible. Nunca más vuelvo a los pibes de mi edad, pienso. Ni por todo el arroz de China.A la vuelta le digo que me deje sobre Avenida La Plata, así no tiene que desviarse tanto para volver a su trabajo. Le agradezco la invitación y nos despedimos.Vuelvo a casa y le entro con ganas a un flan Ser que encuentro sobre la mesa. No tengo hambre, para nada. Pero me quedé con las ganas de comerme algo.
Fede 07: Camino a la Federación
